Racing Club El Primer Grande

Un cilindro explotado

A un punto de River, Cocca palpita un estadio con una multitud en el clásico.

“Ya saboreo un Cilindro explotado” dijo Cocca.

La película no empezó, pero se proyecta en su cabeza. Intenta imaginarla con un final feliz. Le incorpora imágenes. Y entre ellas, Diego Cocca vislumbra una que todos ya pueden adivinar: la cara que lucirá el estadio desde su gran concurrencia.

“Ya saboreo un Cilindro explotado. Soy consciente de lo que se viene. Nos quedan tres finales, estamos con muchas expectativas. Vamos a meterle todas las ganas. Hay que aprovechar este optimismo y contagiárselo a la gente”, se entusiasma, vibra, se frota las manos el técnico de este Racing que el domingo recibirá a River en un duelo vital para su aspiración de título. El triunfo ante Quilmes, el tercero consecutivo, dejó a la Academia conmovida. A solamente una unidad abajo del Millonario.

-¿Qué mostró Racing?

-Que no nos resignamos a no ganar. Con un jugador menos (por la roja a Cabral), podríamos haber ido por el punto, pero seguimos yendo a adelante.

-Pero el equipo volvió a jugar mal. ¿Por qué?

-La chance de pelear el torneo, algo que no pasa seguido en Racing, está en la cabeza de todos. Eso hace que, a veces, el equipo se pase para el otro lado. Lejos de jugar sueltos, de juntarnos, queremos llegar al arco en dos toques, confundimos los caminos.

-¿Cómo vas a combatir ese nerviosismo?

-Tenemos que aprender a superarlo. Ahora jugaremos contra un rival que también pelea el torneo. Es parte de la maduración que debemos lograr.

-¿El sábado sacaron chapa de candidatos?

-Primero, ganar como jugamos no me gusta. Lo hicimos porque buscamos y encontramos un gol de tiro libre. Pero no se jugó como uno quiere. Estamos convencidos de que, cuando hacemos cuatro o cinco toques, el equipo aparece.

-¿Tienen suerte de campeón?

-Siempre necesitás esa cuota. Es la que nos faltó al principio del torneo, no sólo adentro de la cancha sino también por lesiones o suspensiones. Hoy la suerte está con nosotros, producto de que los muchachos nunca bajaron los brazos. El grupo está fuerte, con ganas, unido.

-¿Qué decís de Saja?

-Con Banfield sacó un montón de pelotas. El arquero está para salvarte y ahora nos salvó atajando un penal. Están apareciendo todos. Los necesitamos.

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Fuente: Olé

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