¿Qué le hicieron a Racing?

Un equipo competitivo, un estilo de juego, campeón cada tanto, sin deudas, sin reclamos de jugadores y sin problemas políticos en su interior. Todo eso era Racing hasta hace poco. ¿Qué pasó?

La derrota con Banfield por el debut de la Copa de la Liga 2021 además de dejar una categórica derrota abrió un sinfín de interrogantes. Pero todos conducen a un mismo lugar: Racing Club.

Porque el problema no es solo futbolístico, ni de Pizzi, ni exclusivamente de los jugadores.

De un tiempo hasta acá algo se rompió y el rumbo se empezó a perder.

En el club ya no están hermanados por el bien de la Institución y Milito ya no está. En la cancha se fue Beccacece, partió Lisandro López, y ahora surgen contratos bajos que evidencian malestares en sus jugadores que, por ejemplo, hace que uno ni siquiera esté entrenando por protesta.

¿Qué ha pasado? ¿Qué le hicieron a Racing? ¿En qué se ha transformado?

Para empezar, hay que hablar del verde césped, de lo que pasa allí. El equipo se ha descapitalizado muchísimo y los recambios no parecen estar a la altura. Para colmo el nivel de algunos roza lo vergonzante.

Arias está firme en el arco, es verdad, pero la saga central aún es una incógnita con un Sigali con ganas de volver a Croacia, un compañero de zaga que no se sabe quién (Ahora es Martínez, antes Nery), Pillud siempre está porque es “histórico” y Soto ya no tiene más crédito en Racing porque Mena anda sin entrenar, enojado por su contrato. En el medio, Miranda está muy flojo, Marcelo Díaz ya habla como jugador de la U de Chile con la chomba de Racing puesta, Rojas está perdido y Alcaraz anda perdido buscando su posición en la cancha. Arriba Cuadra nunca era considerado y de golpe es titular, más un renovado Cvitanich que tiene menos goles que Cristaldo en el club. Para colmo Lovera no está bien físicamente y los demás refuerzos parece faltarles tiempos lógicos de “trabajo y adaptación”.

El entrenador está en pleno proceso de formación, pero hizo ruido no patear al arco y realizar un cambio sacando al único delantero (Cvitanich) e ingresando un media punta como Lovera.

No hay que caerle a Pizzi por su reciente llegada, pero lo cierto es ¿qué estilo tienen los equipos de Pizzi? ¿Siguen la línea de los de Coudet o Beccacece? Parecería que no.

Y lo institucional tiene que ver. Los contratos bajos, la llegada de jugadores “Libres” o siendo “préstamos” van calando hondo en la confianza de la gente para con los dirigentes del club. Se fue Diego Milito pero no el “Oso” Fernández que tanto daño ha hecho en el club. Esto es un ejemplo. Capria no tiene el apoyo ni la espalda para bancar muy malos resultados y tiene todas las fichas para ser un fusible de escape. Eso también se perdió.

Todo esto le hicieron a Racing en pocos años: Milito, Lisandro, Lautaro Martínez, Campeonatos, pelear los torneos, equipos intensos, idea clara de juego y dirigentes con el enfoque un tanto distorsionado.

¿Se puede resolver? Sí. Pero hay que trabajar mucho y de inmediato. Acá debe haber cambios inmediatos. ¿Se darán?

Por Federico Dotti

Racing Club – El Primer Grande
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