Piña al mentón, no K.O.

La derrota de Racing supone un golpe duro e improvisto. Sin dudas, hizo sacudir la mandíbula de un equipo que se preparó para otra cosa. ¿Y ahora? A levantarse mucho más fuerte. Hay material.

La velada estaba lista. Todo estaba preparado para el primer triunfo de la temporada. Racing ya había realizado la pretemporada, jugadores frescos, refuerzos listos y con ritmo. Ni hablar del rival, Boca Unidos tiene técnico hace 2 semanas, le faltan jugadores, viajaron casi mil kilómetros para jugar y su mente está puesta en el Federal A.

Por esto, por cada uno de estos detalles, la derrota de Racing por Copa Argentina es una piña al mentón del equipo de Eduardo Coudet.

Negarlo es de necio, esconder la realidad no es la solución. Hasta Licha lo entendió así afirmando que es esto “es un fracaso”.

Fue un golpe certero y directo. Al empezar la pelea, fue uno de ésos golpes que te tiran, te aflojan y te llenan de dudas. Eso sí, para nada está todo perdido.

Racing debe levantarse y reponerse de este mazazo.

Salió mal, no se dio, no se pudo. Pero habrá que tomar apuntes, corregir errores y encausar, nuevamente, a este equipo que viene de salir campeón. Justamente esto, el título, puede servir para algunos como “un colchón” que minimice esta (nueva) derrota inesperada.

En los apuntes de Coudet debe remarcarse algunos puntos a considerar. Las series “mano a mano” son el gran déficit de La Academia. Tanto en Copa Libertadores como Sudamericana son un carma. Incluso en la Copa de la Superliga, superó a Estudiantes pero sin marcar un gol. Este fue el único triunfo en series “mano a mano” de 6 disputadas. Las otras veces perdió con Sarmiento del Chacho (Copa Argentina), River (Copa Libertadores), Corinthians (Copa Sudamericana) y Tigre (Copa de la Superliga).

Es importante el aspecto mental y la preparación de los partidos, se tornará inevitable que este plantel aprenda a manejar estas situaciones.

Un aspecto para mejorar será la dificultad que tiene el primer equipo cuando enfrenta a rivales de “menor envergadura” o que Racing “sea favorito con grandes chances de ganar”. El equipo de Coudet, a veces, presenta dificultades para quebrar el resultado, imponer las condiciones y reflejarlo en el resultado. En los últimos 5 partidos de la Superliga, Racing ganó 2 partidos por 1 a 0 (Estudiantes y Belgrano) y empató 1 a 1 en otras tres ocasiones (Tigre, Colón y Defensa). Ojo, muchas veces no jugó mal y hasta mereció el triunfo. Pero le ha costado bastante.

Y el último punto a tener en cuenta son los intérpretes para los partidos. Después de la piña que le propinó Boca Unidos, queda flotando en el ambiente si el Pulpo González estaba para ser titular o era Matías Rojas el que debía estar allí. Incluso el propio Marcelo Díaz juega muy bien pero quizá, ente un rival que no ataca, el juego de Nery Domínguez más vertical y de pases entre líneas hubiese sido lo mejor. Pero sacando el fatídico partido frente a Boca Unidos, muchas veces Coudet le pifia con algunos cambios. Es quizá, la lectura de los partidos, lo que deba mejorar.

Pero la batalla no está perdida, en absoluto. Duele. Molesta y lastima una derrota así. Pero hay muchas cosas que valen la pena como para rendirse acá.

Nadie quiere echar a nadie, nadie afirma que hay un caos en el club. El hincha de Racing, el verdadero, sabe lo que es un club completamente desordenado.

Esto es un golpe fuerte, es verdad. Descolocó a todos.

Pero la pelea sigue. El viernes habrá un round con Unión en el Cilindro. Y a seguir asomando la cabeza.

Errores se pueden cometer. Lo mejor será capitalizarlo para que no vuelvan a suceder.

A levantarse, la pelea no ha terminado.

Por Federico Dotti

Racing Club – El Primer Grande
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