Olarticoechea y Quiroz

En esta oportunidad recordamos dos jugadores que vivieron diferentes momentos en el club pero que dejaron su huella.

El Vaso y Teté, dos grandes de Racing Club de Avellaneda.

Uno de ellos nació de las inferiores del club, luego se fue pero de todas maneras iba a tener su segundo paso por el club. Además logró cosas muy importantes con la selección nacional, mientras que el otro llegó por amor a la camiseta y jugó durante muchos años en Racing.

Julio “El Vasco” Olarticoechea

Nació el 18 de octubre de 1958 en Saladillo Provincia de Buenos Aires. Olarticoechea fue un jugador que sabía mucho con la pelota en los pies, con una gran vocación ofensiva y con mucho carácter. Se desempeñaba como defensor, aunque también podía jugar en el medio. El Vasco salió de las inferiores del club y debutó en primera en 1976. Vistió las blanca y celeste hasta 1981 que fue transferido a River y posteriormente, en 1984, pasó a jugar a Boca. En 1988 Olarticoechea regresó a La Academia y se consagró campeón de Supercopa Sudamericana. Su segunda etapa en el club finalizó en 1990 cuando se fue a jugar a Mandiyú de Corrientes, club en el que se retiró. El Vasco también tuvo su paso por la selección nacional. En 1982 integró el plantel que fue al mundial de España pero allí no disputó ningún partido. En 1986 iba a vivir su momento de gloria al consagrarse campeón del mundo en México y en 1990 fue sub-campeón del mundo en Italia.

Fernando “Tete” Quiroz

Nació el 19 de junio de 1968 en Bueno Aires. Hizo las divisiones inferiores en Huracán, club con el que debutó en primera en 1990. En el Globo jugó 85 partidos y en 1993 cumplió el sueño de vestir la blanca y celeste. Tete se desempeñaba de volante central y a pesar de no haber conseguido ningún título con la camiseta de Racing, rápidamente ingresó en el corazón de sus hinchas por la entrega que tenia dentro del campo de juego y defender los colores a muerte. En su último tramo como jugador de La Academia sufrió varias lesiones, hasta que en 1999, con 31 años, decidió abandonar el club. Gustavo Costas era el entrenador por ese entonces y fue hasta la casa para intentar convencerlo de que continuara pero la decisión ya estaba tomada. Estas fueron sus palabras antes de alejarse de las canchas: “No jugaré más en Racing, básicamente porque estoy convencido de que le di al club todo lo que podía: mis fuerzas, mi amor, mi voluntad, mi físico y mis ganas. Puse todo al servicio del club durante más de siete años”. En Racing tuvo un total de 125 apariciones y marcó siete goles. Además, como técnico tuvo dos pasos por el club. El primero en 2002 y el segundo en el 2005/2006.