El Ánalisis: Irregularidad como factor

A Racing se le hace difícil tener dos buenos partidos al hilo. Sin estabilidad de rendimientos es complicado que puedan darse resultados.

Buen partido con Lanús por la sexta fecha, debacle con Boca posterior. Vuelta al Cilindro con un injusto 0 – 1 frente al puntero, Newell´s, y luego caída abrupta en Córdoba. En la etapa pre Ischia ni hablar. No se puede enarbolar dos producciones con coherencia futbolística en lo que va del torneo. No se puede jugar como un equipo con nivel para pelear el campeonato y al fin de semana siguiente como un equipo de Primera B Metropolitana.

La irregularidad es el principal problema de Racing hoy. Irregularidad como equipo y a nivel individual. Fernando Ortiz pasa de partidos correctos a otros en los que no frena a nadie. Matías Cahais de anular por completo a un jugador como Lautaro Acosta frente a Lanús a ser un jugador sin presencia en los partidos siguientes. De mitad de cancha para delante lo mismo. Pasa con Luis Ibáñez, con Rodrigo De Paul, Con José Luis Gómez. Se pasa de una dinámica importante a una intrascendencia que preocupa.

El factor de la irregularidad puede surgir de diferentes lugares. La imposibilidad de repetir el equipo por diferentes factores, la situación dirigencial, el cambio de juego y sistema. Seguramente puede ser multicausal y provenir un poco de cada punto. Es necesario lograr que esos focos se estabilicen para que los resultados aparezcan. Sino se hará cada vez más difícil.

Por Gabriel Espósito / @GEsposito85