Covid-19, el rival más difícil de Racing

El club se encuentra ante una situación incómoda e improvista en medio de su preparación. Con los casos conocidos de River y Boca, decide suspender las burbujas y modificar su entrenamiento. Pero el virus sigue siendo el vencedor.

Volver al fútbol era una necesidad profesional y económica. La Conmebol anunció el reinicio de su competencia madre y de allí, 15 de septiembre, no se movió más.

Con protocolos, con utilización de distintas canchas, separando la gente por turnos y muchas cosas más, Racing trató de organizarse para empezar a preparar a sus jugadores para la alta competencia.

Pero aun así hay cosas improvistas que sacuden la preparación de todos los equipos argentinos participantes de la Copa Libertadores. A pesar de todos los testeos serológicos y PCR, hubo un intento de “Burbuja” que salió mal. River tuvo infectado a su entrenador de arqueros y algunos jugadores, Boca tuvo más de 15 casos entre ellos sus 4 arqueros en medio de su famosa “burbuja”. Es decir, aun así, el virus entró igual.

Irresponsabilidad, negligencia o lo que sea. Este virus da señales de ser muy difícil de esquivar. Pero muy difícil. Por eso Racing decidió dar de baja su “Burbuja” que iba a comenzar el 8 de este mes hasta el 30. Tanto River como Boca han servido de ejemplo para evitar un “foco infeccioso” dentro del grupo que atente al normal entrenamiento.

Pero esto no lo exime a Racing. Retira su burbuja, pero el problema sigue estando ahí, en cada rincón del país y más del AMBA.

Entonces ¿Qué se debe hacer? De nada sirve que la Conmebol deje anotar a 40 jugadores si los que se infectan son, por ejemplo, los 4 arqueros. O, en su defecto, podría ser 4 delanteros o 4 defensores.

Esto termina siendo inmanejable y con consecuencias para el normal funcionamiento del equipo. Aislar al infectado por 14 días suena demasiado cuando faltan 16 para empezar a competir.

Es un rival desconocido para Racing, porque no se sabe cómo se le gana y porque lo puede sorprender por cualquier lado. Se depende del cuidado de todos y eso parece demasiado.

¿Qué pasa si una infección masiva se da en el plantel de Beccacece?

Otra vez el negocio y las obligaciones anteceden por sobre la salud de las personas. Pero otra posibilidad no queda.  Esta Copa Libertadores, sin dudas, reinará por su disparidad: Algunos equipos están jugando sus competencias nacionales  y otros no (Argentina, Bolivia y Venezuela). Ya pasaron por sus “masivos positivos” y aun así se han recuperado. Pero la mayoría compite.

¿Entonces?  Entonces habrá que seguir extremando los cuidados. De parte del club seguirán los testeos  serológicos y PCR (hisopado)  para evitar lo que pasó en Boca.

Pero el partido no está ganado. Y se viene la Copa Libertadores. Habrá que cuidarse y tomar conciencia.

Por Federico Dotti

Racing Club – El Primer Grande
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