El Piojo y su despedida perfecta

Hace veintiún años Claudio López jugó su último partido en Racing antes de partir hacia el fútbol español. Con un gol suyo la Academia le ganó a Boca 1 a 0.

El Piojo festeja en su despedida antes de irse al Valencia

Claudio López estaba vendido al Valencia, tenía que viajar hacia España en la noche de aquel 7 de agosto de 1996. Ya había tenido su despedida el 14 de julio en cancha de Rosario Central frente a Newell’s, en el encuentro que la Academia cayó por 1 a 0. Pero ese adiós no lo conformó al Piojo, a quien no le importó tener que ir a las corridas al aeropuerto con tal de poder jugar un partido más junto a toda la hinchada académica, el delantero quería usar su famoso inflador una vez más ante su gente en el Cilindro.

Por la decimoséptima jornada Racing recibía a Boca, el equipo dirigido por Bilardo, que contaba con Maradona y Caniggia entre sus filas, aun tenía chances de ser campeón. Fue un partido bárbaro, los dos equipos demostraron intenciones de ganar el partido y tuvieron las oportunidades para quedarse con los tres puntos. Boca tuvo las más claras pero falló en la definición. La Academia también falló varias, pero el Piojo acertó en una a pocos minutos del final. “Se perdió un par de goles al mejor estilo suyo. Pero apareció una vez y hubo fiesta.” Publicó el diario Olé el 8 de agosto.

El Piojo y la marca de Mac Allister

A los 36 minutos del segundo tiempo el “Chelo” Marcelo Delgado asistió a López y el veloz delantero no falló, zurdazo al ángulo de Navarro Montoya y Racing pasaba al frente en el marcador. El resultado dejaba al Xeneize fuera de la lucha por el campeonato, por lo cual el visitante fue en búsqueda de la igualdad de manera desesperada.

El zurdazo del Piojo, nada pudo hacer Navarro Montoya

Cuando faltaban tres minutos para el final Diego Maradona tuvo la chance de empatar desde el punto de penal, pero su remate se topó con el enorme Nacho González. Fue el quinto penal consecutivo que el “10” de Boca falló en el torneo, una increíble racha negativa.

Un tanto del goleador que se despedía y un penal atajado a Maradona sobre el final, las tribunas eran una fiesta. Antes del final el entrenador racinguista, Miguel Ángel Brindisi, sacó de la cancha al Piojo para que la gente lo ovacione.

La figura del encuentro fue el arquero Ignacio González, quien además del penal se atajó todo durante los noventa minutos y evito varias veces el gol de los de Bilardo. Boca, que contaba con grandes jugadores como Navarro Montoya, Vivas, Basualdo, Verón, el “Kily” González, el camerunés Tchami, Caniggia y Maradona, se quedó con la amargura de haber sido derrotado, «El campeonato se terminó. Me quiero morir» expresó Diego post partido.

Diego Maradona durante aquel partido frente a Racing

Mientras tanto, el Piojo festejaba sentado arriba del travesaño, cantaba junto a los hinchas que le demostraban todo su cariño y agradecían por lo hecho desde su debut con la celeste y blanca allá por 1992. Claudio cerró su primer ciclo en Racing con un total de 32 goles en 128 partidos oficiales, en 1993 logró ser goleador de la Copa Centenario.

Tapa de Clarín del 8 de agosto de 1996