Maldita Copa

La Copa Argentina pasó a ser un escollo gigante para Racing en los últimos años. Además de quedar eliminados muy rápidamente, últimamente es un karma enfrentar a un equipo de otra categoría. ¿Qué está pasando?

Una Copa que se vuelve cada vez más difícil para Racing.

Duele. La Copa Argentina se transformó en un monstruo para Racing. Jugando bien, haciéndolo mal, o hasta en los penales, como sea, el resultado está repitiéndose: La Acadé afuera.

“Arrancamos con un palazo, nuevamente un fracaso en Copa Argentina” dijo el capitán Lisandro López. Y este golpazo invita a la reflexión, al porqué de que se transforme en una copa tan “esquiva”.

Otras vez quedó eliminado prontamente, otra vez por un equipo de otra categoría. ¿Entonces? Entonces habrá que hacer algo para cambiar la racha. Porque algo hay reconocer: Racing está en caída libre en Copa Argentina

Y no se trata sólo de malos resultados, sino también de la dificultad, cada vez más notorio, de enfrentar a equipos que, a priori, son inferiores hasta de categoría.

El rendimiento en las Copas Argentinas

El certamen volvió a disputarse en el 2012, año que la Acadé superó a muchos rivales llegando a la final con Boca Juniors y perdió 2 a 1. De ahí en más, cuando se suponía que iban a seguir las oportunidades todo se vino abajo. En las siguientes 5 ediciones (es decir, 2013, 2014, 2015, 2016 y 2017) Racing superó los 32vos de final (en algunos ni las jugó como en la del 2013). Pero es verdad que de ésas 5 ediciones, sólo en una llegó a la semifinal (2015). El resto quedó eliminado en Octavos (2014 y 2016) y en 16vos de final en 2013 y 2017. Y a partir de allí, la debacle. Perdió en el debut de la 2018 y recién con Boca Unidos.

Racing no gana un partido por copa Argentina desde el 20 de agosto del 2017 (casi 2 años) cuando derrotó 2 a 1 a Mitre por los 32vos de final.

“A medida que pasan los minutos, cada vez se hace más difícil”

Es el mayor déficit que tiene este equipo. Licha dijo eso al quedar nuevamente elimniado por un equipo de otra categoría. Y esto es lo que no aprende Racing. Cada vez le cuesta más enfrentarse a un rival inferior. Cuando los minutos pasan sin hacer un gol, el rival se calma y los de Avellaneda lo sufren (el año pasado lo eliminó Sarmiento del Chaco).

Pero no todas son malas. Desde el 2012 La Academia jugó 9 encuentros por Copa argentina contra rivales de categorías inferiores y ganó 7 veces (Mitre, Gimnasia y Tiro, Atlanta por penales, Independiente de Mendoza, Sarmiento, Patronato y El Porvenir. Es decir, sólo perdió los últimos 2 encuentros con rivales inferiores.

Pero está claro que este será el punto fundamental para que no se repita más.

Una nueva eliminación. Una nueva frustación que debe obligar al Club a replantear algunas cuestiones. Estos jugadores tendrán, de ahora en más, solo la Superliga y la Supercopa. Suena demasiado poco para el último campeón del fútbol argentino.

Pero habrá que dar vuelta de página y enfocarse en lo que viene: El torneo doméstico.

Para la Copa habrá tiempo, para la esquiva Copa habrá que prepararse. Esta maldición hay que destruirla, de alguna manera.

Por Federico Dotti