Racing Club El Primer Grande

Gozar, Sufrir, Ganar

El Primer Grande recibirá a Temperley este sábado en el Cilindro por la última fecha del Torneo. En esta nota revivimos el último partido de Racing contra el Gasolero.

Acuña ponía el 1-0 ante Temperley.
Acuña festejando un gol..

El Primer Grande derrotó como local 2 a 1 a Temperley por la 3era fecha del Torneo largo de la Primera División del Fútbol Argentino y se reencontró con el triunfo en el certamen local.

La estadística no terminaba de ser alentadora para el conjunto de Diego Cocca si analizábamos el dato de que desde el regreso de Milito, Racing no acumulaba victorias si él no estaba en cancha. A partir del golpe sufrido el martes pasado por Copa, el flamante DT decidió preservar al capitán, más allá de presentar el resto de los titulares.

Sencillamente la primera mitad fue de maravilla para la Acadé, que  con un juego vistoso de toque al ras del suelo, abriendo la cancha, triangulando en la ofensiva y siendo contundente hacía delirar a su gente. Marcos Acuña abrió el marcador luego de una gran jugada colectiva forjada en los pies del cumpleañero Luciano Aued para asistir a Camacho, para que el Uruguayo en posición de wing izquierda habilitara con su cabeza para que el ex Ferro empujara a la red.

No conforme con la ventaja parcial, Racing siguió estando fino y en una explosiva contra, Brian Fernández cedió para que La Pantera Bou, quién quedó mano a mano ante Crivelli y definió por abajo para poner el 2 a 0. El primer tiempo fue una exhibición de futbol por parte del local, quien mereció haberse ido al vestuario con una goleada a favor.

En el complemento, los dirigidos por Ricardo Rezza ajustaron marcas y emparejaron el partido sacando a relucir su despliegue y vergüenza deportiva. Tal es así que restando 20 para el final, Grbec anotó el descuento después de una buena maniobra colectiva dejando al Gasolero a tiro del empate.

Ya sin Videla en cancha por haber sido reemplazado los primeros minutos del complemento, el panorama se complicó del todo para la Academia, cuando Luciano Lollo fue a dispiutar un balón de manera vehemente y fue sancionado con roja directa por el árbitro Saúl Laverni.

Los últimos 10 minutos de partido tuvieron tanta dosis de suspenso como de sufrimiento para los racinguistas, quienes veían como el equipo aguantaba los últimos embates del Celeste.

Al sonar el pitazo final del referee se generó el desahogo en el Cilindro por haber sido un triunfo por demás trabajado y ante un digno rival.

De yapa, Diego Milito pudo volver a festejar una victoria fuera del verde césped.

Autor: Miguel Hernández – @ARGENTINOH25

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