Racing Club El Primer Grande

Broggi «El cómo es lo más importante»

Ariel Broggi, ayudante de campo de Coudet, habló con La Noche de Racing (Lunes a Viernes de 23 a 24 por AM 830) y opinó de la actualidad del equipo, el arranque y más. Imperdible charla.

Broggi, la mano derecha del Chacho.
Broggi, la mano derecha del Chacho.

Ariel Broggi es la mano derecha de Coudet. Solo algunas reuniones con extensas charlas entre ambos bastaron para encontrar una fuerte compatibilidad en cuanto a la forma de sentir el fútbol. Porque ambos entienden que la posesión de la pelota es un argumento fundamental, y que, a partir de ella, se debe construir un modelo de juego. Para decir que “el cómo es lo más importante” hay que entender el trabajo que lleva moldear un cómo en el cuál creer. Por eso, al ya conocido “se vive como se juega”, él prefiere agregarle que “se juega como se entrena”. Porque el entrenamiento es el momento en dónde se empieza a bajar línea de lo que un técnico quiere ver en la cancha y a seducir al jugador. Como ayudante de campo, disfruta del análisis y la diagramación de entrenamientos, actividades en las cuales se fortaleció durante su etapa como coordinador de divisiones juveniles de Banfield, porque considera que desde ahí se pueden modificar los hábitos del jugador y lograr que estos no se vuelvan repetitivos ni mecánicos a la hora de tomar decisiones dentro del campo. Broggi se identifica como parte de una nueva camada de entrenadores que lleva a la tenencia del balón como bandera. Confía en que se puede nutrir al fútbol argentino de conceptos europeos y sabe que, pese a que los resultados manden, lo único que nunca se debe negociar es que la idea va por delante.

-¿Estás conforme con el arranque?

-No tuvimos un buen inicio con Unión, tanto desde el resultado como desde el juego. Siempre priorizamos la idea por sobre el resultado. Obvio que se juega para ganar, pero para nosotros el cómo es lo más importante. Tuvimos un primer partido muy flojo, pero pudimos dejar atrás esa imagen y mostrar un equipo con una idea clara y llevar adelante lo que venimos proyectando para este Racing.

-¿En qué están fallando hoy?

-Al tener un poderío ofensivo muy fuerte o determinante, por momentos nos ha pasado de volvernos muy verticales. Por eso, algunos partidos se transforman en un ida y vuelta en el juego, cosa que no queremos. Nosotros apostamos a tener una buena posesión de la pelota para progresar en el campo. En el ida y vuelta, le das lugar al rival a que tenga la pelota. Ahora, obviamente a esa posesión, después hay que darle condimentos ofensivos. No es simplemente subir a los laterales, tener amplitud y jugar para los costados. Se trata de manejar los tiempos de una jugada y mover la pelota hasta encontrar el momento justo para lastimar. La vuelta del Pulpo nos va a ayudar a mejorar en ese aspecto. Él se toma un segundo de más para cada movimiento, que es algo que no todos los jugadores tienen como hábito. Parece que todo el partido se congela y él encuentra esa tranquilidad para dar un pase que sostenga la posesión o filtrar una pelota al área.

-¿Es difícil decirle a jugadores tan ofensivos que paren un poco la pelota?

-Es difícil decirle a Neri Cardozo que no ponga el pase de gol cuando ve un espacio, porque justamente dar el último pase es una de sus principales virtudes. Pero lo que hay que hacerle entender al jugador, es que no le estamos pidiendo que no ponga el pase de gol, sino que busqué y reconozca el mejor momento para dar el pase de gol. O es difícil decirle a Centurión: “en esta no encares, volvé a jugar atrás para buscar huecos”. Porque encarar está en su instinto, entonces cuando tenga la chance lo va a querer hacer aunque no sea el mejor momento. De todas formas, ellos son muy inteligentes y se están adaptando bien a lo que les pide el Chacho en diferentes situaciones. No está mal decidir de otra manera, porque por ejemplo, con Vélez fuimos directos y generamos muchas situaciones de gol. Pero no es lo que nos gusta, porque planteando partidos de ida y vuelta le das la posibilidad al rival de que tenga la pelota y te genere situaciones a vos.

Recién mencionaste la palabra “decidir”. ¿Los errores de Racing tiene más que ver con decisiones y no con ejecuciones?

-El jugador está muy condicionado por lo que decide. Por eso hoy la neurociencia está muy cerca del fútbol. Porque nosotros necesitamos conocer cómo funciona el cerebro del jugador para entrenarlo. Todo parte de ahí, si vos en los entrenamientos planteas situaciones de ataques directos, el jugador se acostumbra y va intentar llevar eso al campo. En cambio, si vos planteas situaciones de tenencia para luego progresar en el terreno, será lo que se verá reflejado. De la manera que se entrena, se juega.

-¿La toma de decisión del jugador es consciente o inconsciente?

-La toma de decisión en el jugador es inconsciente. Responde a hábitos. Pero el hábito se genera en la acción. Es decir, la única forma de fabricar o corregir un hábito, es entrenándolo. Por ejemplo, en nuestro caso y enfocándonos en el problema que marcábamos antes de ser tan directos, nosotros tenemos que condicionar un ejercicio para que el jugador reconozca el momento adecuado para dar un pase vertical. Si tenemos una situación donde un volante ve una diagonal clara del delantero, va a dar el pase. Ahora, si ve la diagonal, pero nosotros ponemos un defensor en el medio que obstaculice el pase, va a tener que buscar otra opción y seguir con la posesión. La idea es que el ejercicio sea lo más parecido a una situación real de juego y orientarlo a que el jugador pueda decidir de la mejor manera, sentir el error y genere hábitos.

-¿Entrenar la toma de decisiones tiene más beneficios, aparte de generar o corregir hábitos?

-También ayuda a que el jugador no se vuelva repetitivo. Volviendo al ejemplo del volante viendo la diagonal del delantero: si ve que hay un defensor bloqueando el pase, mediante los entrenamientos nosotros generamos que el jugador reconozca un plan B, que sería frenar la pelota y dar un pase atrás. Entonces ahí se rompe con algunos automatismos y logramos que los jugadores no se vuelvan mecánicos.

¿Su idea exige más que otras?

-No sé si nuestra idea exige más a los jugadores. Es simplemente una idea, quizás diferente. Hoy en el fútbol no existe un modelo que garantice resultados, se ha logrado el éxito con todos. Es cierto que nos gusta tomar riesgos, pero lo consideramos necesario. Creo que hemos sido ofensivos en todas las canchas, tuvimos intensidad, jugamos con las líneas cortas para tener una recuperación rápida.

-¿El jugador argentino acepta rápidamente estas ideas?

-Algunos sí y otros no. El otro día escuché que Guardiola dijo que el jugador se termina de convencer cuando entra a la cancha y lo que vos le decís que va a pasar, ocurre. Es un poco de eso. A nosotros nos está pasando. El Chacho siempre le dice a los jugadores: “ustedes están disfrutando de esto”, y a mí también me pasa, miro al equipo y disfruto de cómo juega Racing. Y cuando el jugador disfruta, se convence… Ahí tenés más de media batalla ganada.

¿Es clave que la gente se sienta identificada con el equipo?

-El Chacho tiene una forma de ser que facilita que se dé esa identificación. Cae bien en donde esté. De entrada tuvo ese plus. Después sumado a que este fútbol ofensivo que mostramos estuvo acompañado por los resultados, se generó esta linda relación con la gente. Estoy seguro de que si hubiésemos perdido algunos partidos, más de uno habría reclamado que nos cuidáramos un poco más en defensa. Pero son las reglas del juego y lo entendemos así, no vamos a dejar de cumplir con lo que nosotros sentimos como idea.

-Desde el primer día le dieron la pelota a los jugadores…

-La pelota es la base de todo. En nuestros entrenamientos la pelota va a ser siempre protagonista. Si planteamos un modelo con la tenencia como estandarte, no puede faltar.

-¿De dónde copiaron eso? En sus épocas como jugador, las pretemporadas eran muy distintas.

-El fútbol ha mutado para bien. Nosotros somos entrenadores de una nueva camada, que hemos convivido con equipos que plantean modelos de juego con la posesión de la pelota como base, como el Barcelona de Guardiola, y después, de ahí hacia afuera, aparecen todos los condimentos físicos, tácticos o psicológicos que rodean al futbolista. Yo soy de los entrenadores a los que les gusta leer, estudiar, conocer otros modelos para estar más capacitado y darle mejores herramientas a el Chacho para que tome decisiones.

-¿Qué condimentos son importantes para mejorar la posesión?

-Los controles y perfiles. Son muy importantes para darle continuidad al juego. Vos ves como paran la pelota los jugadores de Europa y te das cuenta que ahí está la clave. Yo confío en que se pueden importar esas cosas, la única manera es entrenándolo. Los perfiles y las recepciones orientadas son vitales para tener una buena posesión.

-¿No son detalles?

-No son detalles, son básicos para un modelo de tenencia. Por ejemplo, si queremos salir con un central para tener superioridad numérica en el centro del campo, primero tenemos que eliminar a los delanteros que nos presionen. ¿Cómo los eliminamos? Necesitamos que un central conduzca hasta imantar a un rival, generar un dos contra uno para encontrar un hombre libre y así progresar en el campo. Si en cada paso de ese proceso, perdemos tiempo o fluidez por no estar bien perfilado o por un control que no sea orientado hacia donde queremos llevar la pelota, la salida se va a volver defectuosa. Entiendo que parezcan cosas irrisorias para los hinchas o para quien mira el partido, pero no lo son.

-¿Cuál es el objetivo de este Racing?

-El objetivo es seguir por el sendero del triunfo pero priorizando el cómo. Estamos convencidos de que los resultados no son casualidad, sino que son consecuencias de nuestra idea de juego. No hay que ser hipócritas, nosotros sabemos que los resultados y los títulos son los que nos moviliza, pero no debemos dejar de priorizar cómo conseguirlos.

 

Por Matías Petrone

Fuente: La Noche de Racing

 

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